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La fantástica posición sexual en el ascensor no tiene nada que ver con los ascensores. Sin embargo, definitivamente disfrutarás del viaje hacia arriba y hacia abajo. Abraza a tu crustáceo interior con esta posición sencilla de hacer, pero tan caliente y divertida. El hombre se sienta en el mismo borde del sillón, inclinado hacia atrás. Pone los pies de puntillas, dobla las piernas por las rodillas y las extiende al máximo. La mujer se sube encima, de espaldas a él. Ardiendo de deseo, le abre su núcleo por completo. Sus piernas están absolutamente rectas, como si estuviera haciendo un splits. Coloca las manos hacia atrás y las pone sobre el cuerpo del amante, que toma las riendas en esta increíble posición sexual.